No cabe la menor duda de que si intentas dejar algo a lo que eres tan adicto, es uno de los periodos más problemáticos no sólo para ti, sino también para los familiares. El momento más duro es cuando has sido uno de esos bebedores habituales y un buen día optas por dejarlo. Los primeros meses pueden ser muy duros y sufrirás muchos síntomas de abstinencia. Debes tener cuidado de no acabar haciéndolo solo, informa al médico y forma parte de un grupo de alcohólicos para dejar de beber, juntos las personas pueden marcar la diferencia.

Síntomas de abstinencia

Los primeros cinco días son cruciales y si consigues no beber alcohol durante ellos, el resto será pan comido. Los síntomas de abstinencia pueden ser de moderados a graves. Hay que tener en cuenta que, tu cuerpo estaba acostumbrado al alcohol a diario y lo que hace que el cuerpo lo elimine es una tarea complicada. La conclusión psicológica es más exigente que la angustia física.

Los síntomas generales son: nerviosismo, fuertes dolores de cabeza, sudoración excesiva, insomnio y, en algunos casos, picor. Si los síntomas son más intensos, como náuseas, delirios o convulsiones, deberá acudir a un médico.

Picor

Uno de los síntomas de abstinencia del alcohol es el picor debido a la interrupción brusca del alcohol. El cuerpo no está de acuerdo y también con otra plétora de síntomas de abstinencia, picazón también causa un problema importante. El picor aparece en las comisuras de la boca y los labios. Los problemas con estos indicadores son que son extremadamente difíciles de manejar.

El primero de estos síntomas comienzan a aparecer sólo después de 6-7 horas en lugar de tomar una copa después de lo cual los síntomas significativos comienzan a atacar. Dentro de 24-48 horas estás completamente bajo ataque en forma de varias cosas. En el caso de que el ataque se vuelve realmente grave, entonces es el momento para que usted pueda ir y comprobar usted mismo en el hospital.

Conclusión:

Por lo general, los síntomas sólo persisten durante una semana más o menos, pero esto varía de una persona a otra. Esta es la coyuntura en la que los alcohólicos necesitan mucho apoyo, no sólo de ellos mismos, sino también de sus familiares y amigos. Solo es casi como luchar una batalla perdida. Es un periodo difícil, pero una vez superado, todo es felicidad.