La inflamación es una reacción biológica del organismo para protegerse de los estímulos internos y externos perjudiciales e iniciar la recuperación. Es un componente del sistema inmunitario del cuerpo y nos protege de infecciones, heridas y daños en los tejidos. La inflamación puede ser aguda, es decir, puede comenzar rápidamente y agudizarse en un breve lapso de tiempo.

Inflamación

Por ejemplo, la inflamación aguda puede causar dolencias y afecciones como sinusitis, dolor de garganta por un resfriado, bronquitis grave, etc. La inflamación puede ser crónica como reacción a toxinas no deseadas en el cuerpo, como el humo del cigarrillo o la grasa corporal adicional. ¿Qué causa la inflamación crónica?

  • El estrés: El estrés provoca una actividad en el cerebro que puede dar lugar a un dolor físico que puede provocar una reacción inflamatoria en el cuerpo. Por lo tanto, las personas que sufren estrés pueden experimentar inflamación.
  • Mala alimentación: Algunos alimentos como los azúcares simples, el jarabe de maíz de alta fructosa, las harinas refinadas, los alimentos ricos en grasas trans, la carne procesada, los alimentos fritos, etc. pueden activar la reacción inflamatoria en el organismo. Así que el consumo de estos alimentos debe limitarse.
  • Estilo de vida poco saludable: El consumo de alcohol, el tabaquismo, el sedentarismo y el sobrepeso crean una tensión en el organismo que desencadena una reacción inflamatoria.
  • Contaminación: La contaminación provoca daños en las células que pueden conducir a la inflamación.

¿Qué hacer?

¿Cómo puede protegerse de la inflamación crónica?

  • Actividad física regular: La actividad física normal de 30 a 50 minutos puede permitirte reducir el peso y también te permitirá movilizar las articulaciones. Esto reducirá las probabilidades de desarrollar una inflamación crónica.
  • Llevar una dieta equilibrada y nutritiva: Incluya todos los grupos de alimentos en su dieta diaria. Tome alimentos ricos en ácidos grasos omega 3, fibra, magnesio, carotenoides, antioxidantes y licopeno, ya que estos nutrientes son antiinflamatorios.
  • Aliviar la ansiedad: Dormir al menos 6-8 horas al día, probar y utilizar métodos de relajación del estrés, hablar de cómo te sientes, etc., puede ayudarte a mantener y reducir tu estrés. Esto reduce las probabilidades de inflamación.